“Hay una nueva realidad. Tras la pandemia, el mundo ya no será el mismo”, dijo Dardo Chiesa, coordinador de la Mesa Nacional de Carnes.
“Conocemos las barreras paraarancelarias que provocó la aftosa, que es una gripe de las vacas, y podemos imaginar lo que sucederá con el coronavirus, y los coronavirus que vendrán. Es decir, se viene una suerte de pedidos de sobregarantías respecto de nuestros alimentos”, agregó.
Chiesa participó de una conferencia, que concluyó hace instantes, junto a Jorge Chemes y a Gabriel de Raedemaeker, titular y vicepresidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), respectivamente; y el economista Claudio Zuchovicki.
“No estoy diciendo que la carne transmite el coronavirus, sino pretendo dejar en claro que vamos a tener que establecer garantías de producción y procesos sobre cuáles son los protocolos de trabajo en los campos, en la industria y cómo se garantiza la seguridad alimentaria y la sanidad para quienes trabajan en esos sectores, pero también para el transporte y hasta cómo se reparten los productos hasta las bocas de expendio”, afirmó.
“Sin dudas, esto insumirá un esfuerzo adicional”, agregó.
Chiesa también dijo que la ganadería debe ir hacia la trazabilidad individual. “De qué manera no lo sé, pero si queremos estar en los nuevos mercados mundiales este será uno de los requisitos”, sostuvo.
“El bienestar animal, las buenas prácticas agrícolas y los procesos y manejos sanitarios estarán en el ojo de la tormenta. La industria de la carne no quedará excluida de esto”, aseguró.
El extitular de CRA y del IPCVA también aludió a otros desafíos del sector.
“Hay mucha presión de movimientos activistas que cuestionan a la ganadería por el impacto en el medio ambiente y por la crueldad de la matanza”, comentó.
“También está el tema de la carne sintética. Frente a esto debemos ser cada vez más profesionales y pensar en cómo dar una batalla que, generalmente, es mediática y se libra en las redes sociales y no en los campos donde nosotros estamos acostumbrados a trabajar”, aseveró.
Las carnes alternativas
El ingeniero Chiesa también se refirió a la repercusión en los medios sobre las carnes alternativas.
“En medio de la guerra comercial, ahora la carne artificial apunta al mercado de China’. Este es uno de los títulos que han aparecido en los diarios”, dijo.
“El absurdo llega a España, donde se anticipan a la llegada de hamburguesas veganas para los amantes de la carne. Todo esto es comunicacional. Por ejemplo, otro anuncio es que Lidl, Nestlé y Unilever se pusieron de acuerdo para presentar en línea sus proyectos de carne vegana”, amplió.
“Esto hay que tenerlo en cuenta; no es una pavada. Antes de la crisis, en este diciembre, hablábamos con gente de caterings y nos decían que en las fiestas de casamiento o de 15 años, por ejemplo, entre el 7 y 8 % de los asistentes requieren un menú vegano. Algo así era impensado hace sólo 5 años. Bueno, hoy cambió”, explicó.
“Otro tema es la presión de organizaciones de la Unión Europea para instalar un impuesto a la carne vacuna y así evitar el impacto ambiental. Se pretende castigar al productor”, contó.
En tal sentido, Chiesa mostró mapas con detalles del calentamiento global –en lugares estratégicos– de diciembre último y de este marzo, donde se evidencia una notoria caída de estos parámetros. “Es decir, las vacas siempre estuvieron y el motivo del calentamiento global es otro”, indicó.
El campo y la comunicación
Siguiendo en la misma línea, el dirigente surgido de la Sociedad Rural de Macachín hizo una autocrítica en cuanto a la comunicación de las entidades del campo.
“Nosotros no gastamos plata en comunicación. Somos muy eficientes en producir, pero muy ineficientes en comunicar”, admitió.
“Tenemos un problema ahí respecto de cómo llegar al resto de la sociedad. Este tema ya lo hemos debatido bastante”, comentó.
“Por ejemplo: ‘La vaca contamina’, dicho por un youtuber sin ningún tipo de conocimiento, pero porque tiene esa percepción y más de 12.000 seguidores en Youtube, o en Twitter, tiene más impacto que Ernesto Viglizzo (NdR: reconocido investigador del Conicet, especializado en emisiones y cambio climático), sobre quien tengo un profundo respeto y creo en él, pero el idioma que habla Ernesto es para mí, no para el resto de la gente”, explicó Chiesa.
“O aparecen 20 energúmenos en la pista de Palermo (NdR: en julio último) con unos carteles que dicen cualquier barbaridad y resulta que vos, o un científico, que tenemos una vida trabajando en esto, no llegamos con nuestro lenguaje. Bueno, esto es comunicación”, aseguró.
Al inicio de la reunión, De Raedemaeker agradeció las muestras de solidaridad recibida como consecuencia del incendio intencional que afectó a unas 40 hectáreas de un campo de su familia. Asimismo, Chemes solicitó a las autoridades el rápido esclarecimiento del hecho.
Fuente: Asociación de Ganaderos y Agricultores de Bahía Blanca / www.agabahia.com.ar
